¡¡¡Feliz fiesta de la EPIFANIA del SEÑOR!!!
Esta preciosa fiesta durante el tiempo de Navidad, revela algo de lo invisible, manifiesta mas del misterio de la presencia, resuena en lo más hondo del ser y llama a la esperanza.
La celebración de la solemnidad se terminó ya al anochecer en la explanada del Monasterio.
Tratamos de cultivar la conmemoración y el conocimiento de esta fiesta Epifánica, ya que en Chile no es muy conocida. En Europa y otros países, se festeja mucho en cada 6 de enero. Aquí, se celebra el domingo que cae entre el 2 y el 8 de enero. EPIFANIA equivale a MANIFESTACIÓN del Señor. El Señor se revela a todas las naciones, a todos los hombres, representados en los 3 REYES MAGOS venidos del oriente, de donde los paganos. Es para todos que Jesús vino, a salvarnos y rescatarnos hace 2019 años, pero también HOY.
El HODIE que cantamos en las Antífonas, en la Liturgia, se hace realidad. Jesús nació Hombre, de María y José, pobre en BELÉN, estaban allí, en el portal de nuestra Iglesia monástica, un joven matrimonio con su niño envuelto en pañales. Jesús vivió, creció, murió y resucitó y ascendió a los cielos; pero se quiso quedar en la tierra, se quiso quedar en nuestro corazón, el de cada uno, en los sacramentos y en la Misa, de una forma especial, siempre nos espera.
Por todo esto, y porque se eligió el nombre de Epifanía para la Fundación -que tiene el destino y deseo de colaborar en la salvación, la sanación, la liberación de las ataduras de la pobreza, de la ignorancia, del mal-, asistieron los vecinos y amigos, de cerca y de lejos, el párroco, las personas de las obras sociales y evangelizadoras de la Fundación, Hospedería San Benito, Casa San Benito, Becas San Benito, voluntarios de distintas obras, para seguir celebrando juntos por la tarde esta fiesta de ADORACION.
Fue muy emocionante, -desean que se siga repitiendo-, cantamos, y luego en suspenso se acercó la ESTRELLA por el camino de los alcornoques, guiando y abriendo paso a los Magos que venían a caballo, (¡no conseguimos camellos! como lo hacen en España por las calles en las Primeras Vísperas de la fiesta, repartiendo golosinas a los niños y grandes). Los caballos avanzaron y entraron majestuosamente, siguiendo a la estrella que se posó en el pesebre. Habían ángeles… después llegaron pastores, como participando en la celebración, niños y tutores de la Casa San Benito y del Taller de verano de Cluny, felices de haber cantado… -la letra se dio entre todos- empapándose de esta Historia Sagrada, y descubriendo la belleza de lo invisible… recuerdos ancestrales de nuestra infancia… todos quisimos imitar la actitud de los Magos que se llenaron de inmensa alegría al ver la estrella y se postraron y adoraron al Niño ofreciendo sus dones al gran Rey: oro, incienso y mirra.
EPIFANIA es una fiesta común a toda la Creación. Esta es la fiesta de la LUZ. Agradecemos a cada uno su participación y ayuda en la FUNDACIÓN y les deseamos comenzar el año con esta actitud de los Magos, presentando a Jesús Salvador nuestros dolores y alegrías, nuestros triunfos y fracasos, nuestras bondades y egoísmos, que viviendo con El, podemos ir superando y avanzando por el camino de la Vida, peregrinando por el desierto y por las praderas. Por las montañas y los mares. Por las noches y los días. Con inmenso cariño en nombre de las monjas y el de todos los que se benefician con este esfuerzo, les deseamos un BUEN año NUEVO.
Madre Alejandra, Abadesa