
¡Ven no tardes más!
Lecturas: Is 2, 1-5; Rm 13, 11-14a; Mt 24, 37-44 El escenario actual no solo en nuestro país, sino en el mundo, podría decirse a la luz de la fe, que es el tiempo para

Tiempos Liturgicos: el Adviento
a palabra Adviento viene del latín adventus, que significa venida y se puede traducir también por «presencia», «llegada». En el lenguaje del mundo antiguo era un término técnico utilizado para indicar la llegada de un funcionario, la visita del rey o del emperador a una provincia.

El noviciado celebra el día de Santa Gertrudis. ¿Quién es esta santa?
El día de Santa Gertrudis tradicionalmente es el día de los noviciados de las monjas benedictinas. Por el amor que siempre tuvo santa Gertrudis a la liturgia, ese día las novicias tienen un rol fundamental en la preparación de la liturgia: cantos, lecturas e introducciones.

Cristo Rey
“Jesús, acuérdate de mí cuando llegues a tu Reino”. (Lc. 23, 35-43) Con estas palabras de uno de los malhechores crucificados con Jesús, nos dirigimos al Señor Rey del Universo. Este malhechor, representa a todos los malhechores del mundo, es decir, también a nosotros, ya que todos pertenecemos a esta humanidad donde hay ambición, agresividad y violencia. Sólo este marginado descubre el misterio de Jesús y decide confiarse a él pidiéndole entrar a formar parte de su Reino. Contemplemos hoy a Jesús en la cruz agonizando.

Domingo XXXIII del Tiempo Ordinario
La destrucción del templo y de Jerusalén representa el derrumbamiento de una forma de entender la religión y la vida. También representan nuestras falsas seguridades en las que nos apoyamos y en las que perdemos de vista que nuestra “roca es el Señor”.

Domingo XXX del Tiempo Ordinario
Estas palabras de Jesús a Zaqueo son también para nosotros:” Hoy tengo que alojarme en tu casa”. Este “hoy” en el Evangelio tiene un sentido especial. Es el “hoy” de Dios, es la oportunidad que Dios nos ofrece a cada instante de vivir, crecer y avanzar en nuestra vida. Jesús dice: hoy tengo que alojarme en tu casa. Hoy y no mañana. Todo ocurre en Jericó, la ciudad de las palmeras a 11 Kilómetros del rio Jordán.